Numerosos sacos y bolsas de basura con un macabro contenido fueron hallados en una de las dependencias de cementerio de Guía, en Gran Canaria. Huesos y otros restos humanos permanecían ocultos en una habitación a la espera, según parece, de ser adquiridos por compradores aún no identificados.
Las investigaciones de la Guardia Civil apuntan a que el sepulturero del cementerio de Santa María de Guía podría ser el autor del robo, daño y profanación de diversas tumbas con el objeto de vender los restos de sus moradores a practicantes de ritos ocultistas. Los vecinos, alarmados, acudían al cementerio exigiendo que se abrieran los nichos y tumbas de sus familiares para comprobar que continúan allí (Vídeo al final de la noticia).